El transbordador Discovery que estaba almacenado temporalmente en el edificio de ensamblaje de vehículos (VAB) del Kennedy space Center (Centro Espacial Kennedy) de la NASA en Florida está a la espera de su viaje a bordo de un cargador de transbordadores de la NASA (SCA- Suttle Carrier Aircraft) 747 modificado al Aeropuerto Internacional de Dulles, en Virginia. NASA SCA-905 se ajustó para llegar a las instalaciones Kennedy Shuttle Landing Facility el día 10 de abril. El Discovery rodará fuera del VAB, el sábado 14 de abril y será levantado y colocado encima de SCA en preparación para el transporte a Dulles. El Discovery se ajustará para salir de Kennedy poco después del amanecer del martes 17 de abril y llegará a la zona de Washington, D.C. Alrededor de las 10 am. El Discovery será trasladado al Smithsonian’s Udvar-Hazy Center cerca de Dulles para su exhibición pública permanente el 19 de abril.
La imagen de arriba: el portaaviones transbordador llega a la Pista de Aterrizaje de traslado en el Kennedy Center de la NASA en Florida a las 5:35 pm, hora de prepararse para vuelo ferry del transbordador espacial Discovery a Virginia.Credit : NASA / Frankie Martin
La flota del transbordador espacial de la NASA comenzó a fijar los registros con su primer lanzamiento el 12 de abril de 1981, y continuó para establecer altas calificaciones de rendimiento y resistencia. Comenzando con Columbia y continuando con el Challenger, Discovery, Atlantis y Endeavour, la nave ha llevado a gente a la órbita en repetidas ocasiones, lanzado, recuperado y reparado satélites, ha llevado a cabo investigación de vanguardia y construido la mayor estructura en el espacio, La Estación Espacial Internacional. La última misión del transbordador espacial, STS-135, terminó el 21 de julio de 2011, cuando Atlantis rodó a una parada en su puerto de origen, Kennedy Space Center de la NASA Space, en Florida.
Como primera nave espacial reutilizable de la humanidad, el transbordador espacial empujó los límites del descubrimiento cada vez más lejos, requiriendo no solo de tecnologías avanzadas sino el gran esfuerzo de una inmensa fuerza de trabajo. Miles de funcionarios públicos y contratistas en todos los centros de la NASA y en todo el país han demostrado un compromiso inquebrantable para el éxito de la misión y el objetivo mayor de la exploración espacial.
La demanda en aumento por turbinas de viento y vehículos eléctricos podría poner presión a los suministros de algunos metales raros.
David L. Chandler, MIT News Office. Original (en inglés)
Mientras el mundo se mueve hacia un mayor uso de fuentes de energía que utilizan poco carbono o que no lo utilizan, un posible cuello de botella se aproxima, de acuerdo a un nuevo estudio del MIT (Massachusetts Institute of Technology – Instituto Tecnológico de Massachusetts): el suministro de ciertos metales necesarios para tecnologías de energía limpia claves.
Turbinas de viento, una de las fuentes de electricidad libre de emisiones con más rápido crecimiento, depende de imanes que utilizan elementos raros como el neodimio. Y el elemento disprosio es un elemento esencial en algunos motores de vehículos eléctricos. El suministro de ambos elementos – actualmente importados casi exclusivamente de China – podría enfrentar escasez en los próximos años, encontró la investigación.
El estudio, liderado por un equipo de investigadores en el Laboratorio de Sistemas de Materiales en el MIT – la posdoctorado Elisa Alonso, el científico investigador Richard Roth, el científico investigador Frank R. Field y el investigador principal Randolph Kirchain – ha sido publicado en línea en el diario Ciencia y Tecnología Ambiental, y aparecerá impreso en una próxima edición. Tres investigadores de la Compañía Ford Motor son coautores.
El estudio miró 10 de los llamados “metales raros”, un grupo de 17 elementos que tienen propiedades similares y que – a pesar de su nombre – no son particularmente raros. Todos los 10 elementos estudiados tienen algunos usos en equipo de alta tecnología, en muchos casos en tecnología relacionada a la energía baja en carbono. De esos 10, dos es probable que enfrenten serios desafíos de abastecimiento en los próximos años.
El más grande desafío probablemente será para el disprosio: La demanda podría aumentar en un 2,600 por ciento durante los próximos 25 años, de acuerdo al estudio. La demanda de Neodimio podría incrementarse hasta en un 700 por ciento. Ambos materiales tienen propiedades magnéticas excepcionales que los hacen especialmente bien preparados para usarlos en motores y baterías.
Una turbina larga sencilla (que provee alrededor de 3.5 megawatts) contiene típicamente 300 kilogramos de metales raros. Un carro convencional usa un poco más de 435 gramos de materiales raros – principalmente en pequeños motores, como aquellos que hacen funcionar el limpiaparabrisas – pero un auto eléctrico puede usar casi 10 veces más materiales en sus baterías y motores.
Actualmente, China produce el 98 por ciento de los metales raros del mundo, volviendo esos metales “los recursos más concentrados geográficamente de cualquier recurso de escala comercial”, dice Kirchain.
Históricamente, la producción de estos metales se ha incrementado por solo un pequeño porcentaje cada año. Pero incrementos mucho más grandes en la producción serán necesarios para cubrir la nueva demanda esperada, muestra el estudio.
China tiene alrededor del 50 por ciento de las reservas conocidas de metales raros; los Estados Unidos también tiene depósitos significativos. Extraer estos materiales en los Estados Unidos ha cesado casi completamente – principalmente por las regulaciones ambientales que han incrementado el costo de producción – pero métodos de minería mejorados están volviendo estos recursos usables nuevamente.
Elementos raros nunca son encontrados aislados; en su lugar, están mezclados juntos en ciertas rocas naturales, y deben ser separados por medio de procesos químicos. “Están mezclados juntos en estos depósitos”, dice Kirchain, “y la tasa en los depósitos no necesariamente se alinea con lo que desearíamos” para las necesidades de manufactura actuales.
Neodimio y disprosio no son los elementos raros más ampliamente usados, pero son los que se espera que tengan el más grande problema de suministro, explica Alonso, debido al rápido crecimiento proyectado en la demanda de imanes de alto rendimiento.
Kirchan dice que cuando hablan sobre un problema en el suministro, no necesariamente significa que los materiales no estás disponibles. En lugar de esto, es una cuestión de si el precio sube a un punto en el que ciertos usos ya no sean económicamente viables.
Los investigadores enfatizan que su estudio no quiere decir que habrá un problema alcanzando la demanda, pero dicen que quiere decir que será importante investigar y desarrollar nuevas fuentes de estos materiales; para mejorar la eficiencia de su uso en dispositivos; para identificar materiales sustitutos; o para desarrollar la infraestructura para reciclar los metales una vez que los dispositivos alcancen el final de su vida útil. El propósito de estudios como éste es identificar esos recursos para saber cual de estos desarrollos es más presionante.
Mientras que los materiales en bruto existen en el suelo en cantidades que podrían cubrir muchas décadas de demanda en incremento, Kirchain dice que el desafío viene en escalar los suministros a una tasa equivalente a los incrementos esperados en la demanda. Desarrollar una nueva mina puede tomar una década o más entre encontrar el lugar, obtener permisos, asentarla y la construcción.
“El punto no es de que los vayamos a ‘terminar’,” dice Kirchain, “pero es una situación en la que debemos enfocarnos, en construir una base de suministros y en mejorar esas tecnologías que usan y reusan los materiales. Necesita ser un enfoque de investigación y desarrollo”.
Barbara Reck, una investigadora principal en la Universidad de Yale quien no estuvo involucrada en este trabajo, dice “los resultados remarcan los serios desafíos en el suministro que algunas de las tierras raras pueden enfrentar en una sociedad baja en carbono”, dijo, y “también es un vivo recuerdo de que la práctica actual de no reciclar ninguna tierra rara al final de su ciclo de vida no es sustentable y necesita ser revertida”.
Una nueva técnica de obtención de imágenes está basada en la luz y el sonido para crear detalladas imágenes a color de tumores en las profundidades del cuerpo. La tecnología, llamada tomografía fotoacústica, eventualmente podría ayudar a los doctores a diagnosticar el cáncer antes de lo que es posible ahora y monitorear más precisamente los efectos del tratamiento contra el cáncer – todo sin la radiación involucrada en rayos X y en tomografías computarizadas o el costo de una resonancia magnética.
La tecnología puede fácilmente penetrar los tejidos del cuerpo para visualizar tumores a profundidades que antes no eran posibles. La tecnología fue explicada el 3 de abril en la reunión anual de la Asociación Americana para la Investigación del Cáncer en Chicago.
Pequeñas partículas podrían manufacturar drogas contra el cáncer en el lugar donde está el tumor.
Anne Trafton, MIT News Office. Original (en inglés)
Drogas hechas de proteínas han mostrado promesas en tratar el cáncer, pero son difíciles de entregar porque el cuerpo usualmente rompe las proteínas antes de que alcance su destino.
Para sobreponerse a ese obstáculo, un equipo de investigadores del MIT (Massachusetts Institute of Technology – Instituto Tecnológico de Massachusetts) ha desarrollado un nuevo tipo de nanopartícula que puede sintetizar proteínas en demanda. Una vez que estas fábricas de proteínas alcanzan sus objetivos, los investigadores pueden convertir la síntesis de proteínas alumbrándolas con luz ultravioleta en ellas.
Las partículas podrían ser usadas para liberar pequeñas proteínas que matan las células cancerosas, y eventualmente proteínas más grandes como anticuerpos que disparan el sistema inmune para destruir los tumores, dice Avi Shroeder, un posdoctorado en el Instituto Para Investigación de Cáncer Integrativa David H. Koch del MIT y autor líder de una revista académica que aparece en el diario NanoLetters.
Esta es la primera prueba de concepto que puede sintetizar nuevos componentes de materiales inertes dentro del cuerpo”, dice Schroeder, quien trabaja en los laboratorios de Robert Langer, Profesor del Instituto David H. Koch del MIT, y Daniel Anderson, un profesor asociado de ciencias de la salud y tecnología e ingeniería química.
Langer y Anderson también son autores de la revista académica, junto con los antiguos posdoctorados del Instituto Koch Michael Goldber, Christian Kastrup y Christopher Levins.
Imitando a la naturaleza
A los investigadores se les ocurrió la idea de partículas constructoras de proteínas cuando trataban de pensar en nuevas maneras de atacar tumores metastásicos – aquellos que se esparcen del sitio original del cáncer a otras partes del cuerpo. Dichas metástasis causan el 90% de las muertes por cáncer.
Decidieron imitar la estrategia de manufactura de proteínas encontradas en la naturaleza. Células que guardan sus instrucciones para construir proteínas en ADN, el cual es entonces copiado en ARN mensajeros (ARNm o mRNA por sus siglas en inglés). Ese ARNm carga los planos de proteínas a estructuras celulares llamadas ribosomas, las que leen el ARNm y lo traducen en secuencias de aminoácidos. Los aminoácidos son encadenados juntos para formar proteínas.
“Queríamos usar maquinaria que ya había probado ser muy efectiva. Los ribosomas son usados en la naturaleza, y fueron perfeccionados por la naturaleza durante miles de millones de años para ser la mejor máquina que puede producir proteínas”, dice Schroeder.
Los investigadores diseñaron las nuevas nanopartículas para auto-ensamblarse de una mezcla que incluye lípidos – que forman los caparazones exteriores de las partículas – además de una mezcla de ribosomas, aminoácidos y las enzimas necesarias para la síntesis de proteínas. También incluyeron en la mezcla las secuencias de ADN para las proteínas deseadas.
El ADN es atrapado por un compuesto químico llamado DMNPE, que se enlaza a él. Este compuesto libera el ADN cuando es expuesto a luz ultravioleta.
“Quieres ser capaz de dispararlo para que el sistema solo se encienda cuando quieres que trabaje”, dice Schroeder. “Cuando las partículas son golpeadas por luz, el ADN es liberado de un compuesto que lo enjaula y entonces puede entrar al ciclo de producir las proteínas”.
Fábricas programables
En este estudio, las partículas fueron programadas para producir ya sea proteína fluorescente verde (GFP – green fluorescent protein) o luciferasa, ambas son fáciles de detectar. Pruebas en ratones mostraron que las partículas fueron exitosamente puestas a producir la proteína cuando luz ultravioleta las alumbró.
Esperar hasta que las partículas alcancen su destino antes de activarlas podría ayudarles a prevenir efectos secundarios de una droga particularmente tóxica, dice James Heath, un profesor de química en el Instituto de Tecnología de California. Sin embargo, más pruebas deben realizarse para demostrar que las partículas alcanzarían su destino intencionado en humanos, y que solo puedan ser utilizadas para producir proteínas terapéuticas, dice.
“Hay muchos detalles en los que aún debe trabajarse para que éste sea un acercamiento terapéutico viable, pero es un concepto realmente estupendo e innovador, y ciertamente hace funcionar la imaginación de uno”, dice Heath, quien no fue parte del equipo investigador.
Los investigadores ahora trabajan en partículas que puedan sintetizar drogas potenciales contra el cáncer. Algunas de estas proteínas son tóxicas para células cancerosas y saludables – pero usando este sistema de entrega, la producción de proteínas podría ser encendida solo en el tumor, evitando los efectos secundarios en células saludables.
El equipo también trabaja en nuevas maneras de activar las nanopartículas. Posibles acercamientos incluyen la producción disparada por el nivel de acidez u otras condiciones biológicas específicas a ciertas regiones del cuerpo o células.
El martes 10 de abril, el período de “Soporte Principal” de Microsoft para Windows Vista terminará y entrará en un nuevo período conocido como “Soporte Extendido”.
Lo que esto significa es que el soporte disponible sin costo terminará, y ya no habrá más Service Pack creados para Windows Vista, además que futuras versiones de Internet Explorer (como Internet Explorer 10) no estarán disponibles para Vista. Adicionalmente, no habrá más arreglos que no sean para seguridad disponibles sin un Acuerdo Extendido de Soporte (EHSA – Extended Hotfix Support Agreement).
Esto durará 5 años antes de que el soporte para Vista termine completamente en el 2017.
Un nuevo modelo predice como la arena y otros materiales granulares fluyen.
Jennifer Chu, MIT News Office. Original (en inglés).
La arena en un reloj de arena podría parecer simple, pero dichos materiales granulares son difíciles de modelar. Desde lejos, la arena que fluye parece un líquido, fluyendo desde el centro de un reloj de arena como el agua de una llave. Pero de cerca, uno puede ver los granos individuales deslizándose uno contra el otro, formando un montículo en la base que mantiene su forma, como un sólido.
El curioso comportamiento de la arena – parte fluido, parte sólido – ha hecho difícil que los investigadores predigan como ésta y otros materiales granulares fluyen bajo varias condiciones. Un modelo preciso para el flujo granular sería particularmente útil en optimizar procesos como la manufactura farmacéutica y la producción de grano, donde pequeñas píldoras y granos fluyen a través de tolvas y silos en cantidades masivas. Cuando no están bien controlados, dichos flujos a gran escala pueden causar bloqueos que son costosos y a veces peligrosos de limpiar.
Ahora Ken Kamrin del Departamento de Ingeniería Mecánica del MIT (Massachusetts Institute of Technology – Instituto Tecnológico de Massachusetts) ha encontrado un modelo que predice el flujo de materiales granulares bajo una variedad de condiciones. El modelo mejora los modelos existentes tomando en consideración un factor importante: cómo el tamaño del grano afecta el flujo entero. Kamrin y Georg Koval, profesor asistente de Ingeniería Civil en el Instituto Nacional de Ciencias Aplicadas en Strasbourg, Francia, usó el nuevo modelo para predecir el flujo de arena en varias configuraciones – incluyendo una tolva y un paso circular – y encontró que las predicciones del modelo coincidían casi perfectamente con los resultados reales. Una revista académica detallando el nuevo modelo aparecerá en el diario Physical Review Letters.
“Las ecuaciones básicas gobernando el flujo del agua han sido conocidas por más de un siglo”, dice Kamrin, profesor asistente de desarrollo de carreras de Ingeniería Mecánica. “No ha habido algo similar a la arena, donde yo pueda darte una taza de arena, y decirte qué ecuaciones serán necesarias para predecir como se escurrirá si aprieto la taza”.
Volviendo borrosas las líneas
Kamrin explica que desarrollar un modelo de flujo – también conocido como modelo continuo – esencialmente significa “volver borrosos” los granos individuales o moléculas. Mientras que una computadora puede ser programada para predecir el comportamiento de cada molécula en, digamos, una taza de agua fluyendo, Kamrin dice que este ejercicio tomaría años. En su lugar, los investigadores han desarrollado modelos continuos. Imaginan dividir la taza en un pequeño mosaico de pequeños cubos de agua, cada cubo lo suficientemente pequeño comparado al tamaño del entorno de flujo entero, sin embargo lo suficientemente largo para contener muchas moléculas y colisiones moleculares. Los investigadores pueden realizar experimentos básicos de laboratorio en un cubo de agua sencillo, analizando cómo el cubo se deforma bajo diferentes estreses. Para predecir eficientemente como el agua fluye en la taza, resuelves una ecuación diferencial que aplica el comportamiento de un solo cubo a cada cubo en la malla de la taza.
Dichos modelos funcionan bien para fluidos como el agua que es fácilmente divisible en partículas que son casi infinitestimalmente pequeñas. Sin embargo, los granos de arena son mucho más grandes que las moléculas de agua – y Karmin encontró que el tamaño de un grano individual puede afectar significativamente la precisión del modelo continuo.
Por ejemplo, un modelo puede estimar precisamente cómo las moléculas de agua fluyen en una taza, principalmente por que el tamaño de una molécula es mucho más pequeño que la taza misma. Para la misma escala relativa en el flujo de granos, dice Kamrin, el contenedor de arena tendría que ser del tamaño de San Francisco.
Charla entre vecinos
¿Pero por qué exactamente importa el tamaño? Kamrin razona que cuando se modela el flujo del agua, las moléculas son tan pequeñas que sus efectos se quedan dentro de sus cubos respectivos. Como resultado, un modelo que toma en promedio el comportamiento de cada cubo en la malla, y asume que cada cubo es una entidad separada, da un estimado del flujo relativamente precisa. Sin embargo, Kamrin dice que en un flujo granular, granos mucho más grandes como la arena pueden causar “sangrado” a los cubos vecinos, creando efectos de cascada que no son considerados en los modelos existentes.
“Hay más charla entre vecinos”, dice Kamrin. “Es como que las propiedades mecánicas básicas de un cubo de granos se vuelve influenciada por el movimiento de los cubos vecinos”.
Kamrin modificó las ecuaciones para un modelo continuo existente para tomar en cuenta el tamaño de los granos, y probó su modelo en diferentes configuraciones, incluyendo arena fluyendo a través de una tolva y rotando en una abertura circular. El nuevo modelo no solo predijo áreas de granos fluyendo rápidamente, sino también donde se movían lentos, en los bordes de cada configuración – áreas que los modelos tradicionales asumieron que serían completamente estáticas. Las predicciones del nuevo modelo encajaron muy de cerca con simulaciones partícula a partícula en las mismas configuraciones.
Lyderic Bocquet, un profesor de física en la Universidad de Lyon en Francia, ve los resultados de Kamrin como un gran paso hacia un modelo de flujo granular con “poder predictivo confiable”.
“Ha habido enormes esfuerzos en los últimos años para proponer leyes que describen los flujos granulares, con la última meta de diseñar dispositivos o procesos que involucren materiales granulares”, dice Bocquet. “La generalización a un sistema más amplio todavía faltaba. Esto es donde el modelo de Ken hace la conexión”.
El modelo, al correr en una computadora, puede producir campos de fluidos precisos en minutos, y podría beneficiar a ingenieros desarrollando procesos de manufactura para farmacéuticos y productos agrícolas. Por ejemplo, dice Kamrin, los ingenieros podrían probar varias formas de tolvas y aberturas en el modelo para encontrar una geometría que maximice el flujo, o mitigar la presión de pared potencialmente peligrosa, antes de deseñar o construir equipo para procesar materiales granulares.
Kamrin dice que entender el como fluyen los materiales granulares podría también ayudar a predecir fenómenos geológicos como los deslaves y avalanchas y ayudar a los ingenieros a diseñar nuevas maneras de generar mejor tracción en la arena.
“El material granular es el segundo material más manejado en la industria, solo superado por el agua”, dice Kamrin. “Estoy convencido que hay un millón de aplicaciones”.
La quimioterapia es realmente un veneno para las células, se toma ventaja de el hecho de que los tumores tienen un metabolismo acelerado y de esta manera absorben el veneno más rápido que el resto del cuerpo y mueren antes de que nos mate a nosotros mismos. Aunque los doctores apuntan hacia los tumores cuando prescriben el uso de la quimioterapia, los compuestos golpean una gran variedad de lugares en el cuerpo, llevando a efectos secundarios como daño a la médula espinal y pérdida de cabello.
Para mejorar su precisión, investigadores han tratado de “empacar” estas drogas dentro de pequeños contenedores huecos que pueden ser dirigidos hacia los tumores dejando de lado los tejidos saludables. Pero el tamaño, forma y acomodo de estas “nanopartículas” puede afectar drásticamente donde y cuando son tomados. Ahora, los científicos han estudiando alrededor de 100 diferentes formas de nanopartículas y mostrado que cuando una droga de quimioterapia convencional es empacada dentro de la mejor de estas nanopartículas, es considerablemente más efectiva peleando contra el cáncer de próstata en animales comparado con la droga sola.
Imagen: J. Hrkach et al., Science Translational Medicine.
Un proyecto del MIT (Massachusetts Institute of Technology – Instituto Tecnológico de Massachusetts), fundado con una beca de 10 millones de dólares, podría transformar el diseño y la producción robótica.
MIT está liderando un nuevo proyecto ambicioso para reinventar como los robots son diseñados y producidos. Fundado por una beca de 10 millones de dólares de la Fundación Nacional de Ciencias (NSF – National Science Foundation), el proyecto apunta a desarrollar una tecnología de escritorio que haría posible que la persona promedio diseñe, personalice e imprima un robot especializado en cuestión de horas.
“Esta investigación contempla una manera completamente nueva de pensar sobre el diseño y la manufactura de robots, y podría tener un profundo impacto en la sociedad”, dice la profesora Daniela Rus del MIT, líder del proyecto y una investigadora principal en el Laboratorio de Ciencia Computacional e Inteligencia Artificial (CSAIL). “Creemos que tiene el potencial de transformar la manufactura y democratizar el acceso a robots”.
“Nuestra meta es desarrollar tecnología que permita a cualquiera manufacturar su propio robot personalizado. Esto verdaderamente cambiaría el juego”, dice el profesor Vijay Kumar, quien lidera el equipo de la Universidad de Pennsylvania. “Podría permitir el diseño y la manufactura rápida de bienes personalizados, y cambiar la manera en la que enseñamos ciencia y tecnología en las escuelas preparatorias”.
El proyecto de cinco años, llamado “Una Expedición en Computación para Compilar Máquinas Imprimibles Programables”, reúne un equipo de investigadores del MIT, la Universidad de Pennsylvania y la Universidad de Harvard, y está fundada como parte del programa “Expediciones en Computación” del NSF.
Actualmente toma años producir, programar y diseñar un robot funcional, y es un proceso extremadamente caro, involucrando diseño de hardware y software, aprendizaje de máquinas y visión, y técnicas de programación avanzadas. El nuevo proyecto automatizaría el proceso de producir dispositivos tridimensionales funcionales y le permitiría a individuos diseñar y construir robots funcionales de materiales tan fácilmente accesibles como una hoja de papel.
“Nuestra visión es desarrollar un proceso desde el comienzo hasta el final; específicamente, un compilador para construir máquinas físicas que comiencen con un alto nivel de especificaciones de función, y provea una máquina programable para esa función usando procesos de impresión simples”, dice Rus.
Investigadores esperan crear una plataforma que permita a un individuo identificar un problema casero que necesite asistencia; entonces dirigirse a una tienda local de impresión para seleccionar un anteproyecto, de una librería de diseños robóticos; y entonces personalizar un dispositivo robótico fácil de usar que pudiera resolver el problema. Dentro de 24 horas, el robot sería impreso, ensamblado, completamente programado y estaría listo para la acción.
Alterando la manera en la que las máquinas pueden ser producidas, diseñadas y construidas, el proyecto podría tener implicaciones de largo alcance para una variedad de campos.
“Este proyecto apunta a reducir dramáticamente el tiempo de desarrollo para una variedad de robots útiles, abriendo las puertas a aplicaciones potenciales en manufactura, educación, cuidado de la salud personalizada e incluso alivio en casos de desastre”, dice Rob Wood, un profesor asociado en la Universidad de Harvard.
Actualmente, investigadores del proyecto están enfocando su investigación en varias areas: desarrollando una interfaz de programación de aplicaciones (API) para una simple especificación de funciones y diseño; escribiendo algoritmos que permitirían control del ensamblado de un dispositivo y sus operaciones; creando un lenguaje de programación fácil de usar; y diseñando materiales nuevos y programables que permitirían la fabricación automática de robots.
Hasta ahora, el equipo de investigación ha creado el prototipo de dos máquinas para diseñar, imprimir y programar, incluyendo un robot similar a un insecto que podría ser usado para explorar un área contaminada y una pinza que podría ser usada por personas con movilidad limitada.
“Es realmente exitante pensar sobre el tipo de impacto que este trabajo podría tener en la población general – más allá de solo unas pocas personas selectas que trabajan en robótica”, dice el profesor asociado Wojcieth Matusik, también un investigador principal en CSAIL.
Adicionalmente a Rus, otros investigadores colaboradores de CSAIL incluyen el científico visitante Martin Demaine, el profesor asociado Wojciech Matusik, el profesor Martin Rinard, y el profesor asistente Sangbae Kim del Dapartamento de Ingeniería Mecánica de MIT. Además de Wood y Kumar, el equipo también incluye al profesor asociado Andre DeHon, al profesor Sanjeev Khanna y al profesor Insup Lee, todos de la Universidad de Pennsylvania (UPenn).
El satélite Misión de Medición de Lluvias Tropicales (TRMM – Tropical Rainfall Measuring Mission) de la NASA ofrece una mirada a las tormentas eléctricas en tres dimensiones y los científicos muestran la altura de las nubes de tormenta y las tasas de precipitación procedente de ellas, las cuales indican su severidad. Tormentas eléctricas poderosas que crearon condiciones de clima severo fueron de más de 8 millas de altura.
Imagen: NASA/SSAI, Hal Pierce
El satélite TRMM pasó por encima del noreste de Texas el 3 de abril, 8:33 pm CDT y recogió datos de precipitaciones y la altura de nubes de una línea de tormentas moviéndose por la zona. La imagen de las precipitaciones mostraron una clara línea de tormentas de tornados extendiéndose desde Arkansas a través del centro de Texas, donde las fuertes lluvias caídas a lo largo de una línea eran de más de 2 pulgadas (50 mm) por hora (en rojo). (Crédito: NASA / IASS, Hal Pierce)
Imagen: NASA/SSAI, Hal Pierce
Los datos recolectados por el Radar de Precipitaciones (PR) de TRMM sobre el noreste de Texas el 3 de abril a las 8:33 pm CDT fueron utilizados para proporcionar una vista 3-D de la distribución de la intensidad y distribución vertical de la precipitación. Los datos de relaciones públicas mostraron que algunas de las tormentas de gran alcance dentro de esta área fueron empujando hacia arriba a una altura por encima de unas 8 millas (13 km). (Crédito: NASA / IASS, Hal Pierce)
El Centro de predicciones de tormentas del servicio del Clima Nacional NOAA (National Oceanic and Atmospheric Administration) recibió 18 reportes de tornados ocurridos el 3 de abril sobre el noreste de texas. Algunas de estas tormentas muy destructivas soltaron granizos del tamaño de una pelota de softbol al sur del área Fort Worth / de Dallas.
Para ver un sobrevuelo simulado del satélite TRMM alrededor de estas tormenta, visita:
TRMM es un conjunto de misiones entre la NASA y la Agencia Espacial Japonesa, JAXA. NASA y JAXA están actualmente colaborando en la misión de seguimiento llamada la Medición de Precipitaciones Globales (the Global Precipitation Measurement-GPM mission). La misión GPM proporcionará una nueva generación de observaciones por satélite de lluvia y nieve en todo el mundo cada tres horas para la investigación científica y beneficios sociales.
Vehículos de lanzamiento de carga pesada cerca de los Estados Unidos, el Sistema de Lanzamiento Espacial (SLS – Space Launch System), está a un paso más cerca de su primer lanzamiento en 2017, después de la finalización con éxito de la primera fase de un conjunto combinado de las revisiones de logros.
El programa SLS ha completado el paso uno en una combinada revisión de requisitos del sistema y Revisión de definición del sistema – ambas revisiones extensas dirigidas por la NASA, requisitos establecidos para restringir aún más el alcance del diseño del sistema y evaluar el concepto de vehículo basado en los requisitos del programa de alto nivel. Las revisiones incluyen establecer los requisitos de los vehículos de lanzamiento
“Es emocionante ver hasta que punto este programa ha llegado en tan poco tiempo”, dijo Todd May, director del programa de SLS en el Centro Marshall para Vuelos Espaciales de la NASA en Huntsville, Alabama. “La terminación de este primer paso de revisiones mueve el primer cohete espacial profundo de la nación desde el desarrollo del concepto al diseño preliminar”.
Las críticas de los logros son dos en una serie de revisiones de avance del ciclo de vida del vehículo desde el diseño de concepto a la preparación de vuelos. El primer paso incluyo una revisión técnica centrada de los requisitos del programa con información sobre costos, plazos y riesgo. Una junta de revisión permanente compuesta por expertos técnicos de toda la agencia evaluó los documentos del programa SLS incluidos los requisitos de los vehículos, especificaciones, planes, estudios y reportes. La junta aseguró criterios específicos, se reunió y confirmó que los requisitos estén completos, validado y sensible a los requisitos de la misión.
La combinación de las dos revisiones así como la seguridad y análisis de fiabilidad es una manera fundamentalmente diferente de llevar a cabo las revisiones de los programas. El equipo de SLS está optimizando los procesos para proporcionar un ambiente seguro, accesible y un cohete sostenible.
“Este control nos da una comprensión madura de los requerimientos, solidifica que el diseño del concepto del vehículo cumplirá todos los requisitos del programa, de la misión y señaliza que el SLS esta listo para empezar las actividades de diseño de ingeniería”, agregó May. “Estamos avanzando para ofrecer una nueva capacidad nacional para llevar de nuevo a America a la exploración espacial”.
El paso dos, que comenzará a principios de verano, incluirá una evaluación integrada de la técnica y de los componentes programáticos evaluando plenamente los costos, plazos y el riesgo involucrados con el programa.
The Space Launch System will provide an entirely new capability for human exploration beyond Earth orbit, taking astronauts farther into space than ever before. It also can back up commercial and international partner transportation services to the International Space Station. Designed to be flexible for crew or cargo missions, the SLS will continue America’s journey of discovery from the unique vantage point of space. The Marshall Space Flight Center is leading the design and development of the rocket that can take us to the asteroids, Lagrange points – positions in space where a satellite or science instrument could be stationed in a relative steady state –the moon, and eventually to Mars.
El sistema de lanzamiento espacial proporcionará una capacidad totalmente nueva para exploración humana más allá de la órbita de la tierra, llevando a los astronautas más lejos en el espacio que nunca antes. También puede respaldar los servicios asociados comerciales e internacionales de transporte a la Estación Espacial Internacional. Diseñado para ser flexible para las misiones de la tripulación o la carga, El SLS continuará el viaje de Estados Unidos de descubrimiento desde el punto de vista único del espacio. El Centro de Vuelo Espacial Marshal está liderando el diseño y desarrollo del cohete que puede llevarnos a los asteroides, los puntos de Lagrange – las posiciones en el espacio donde un satélite o instrumento de la ciencia que podría ser colocado en un estado relativamente estacionario – a la Luna, y eventualmente a Marte.