La exposición a calores y humedades altas puede producir insolación, los cuales ocurren de repente, cuando el cuerpo no puede disipar más calor del que genera. Éstos deben ser tratados inmediatamente, ya que un ataque puede ser falta, especialmente en ancianos y bebés.
Síntomas
- De repente, la temperatura del cuerpo se sube a 40 grados o más.
- Piel caliente, reseca y sonrojada.
- La respiración se vuelve inestable.
- El pulso se torna acelerado.
- Es posible que la persona se queje de dolor de cabeza.
- También puede quejarse de mareo y nausea.
Tratamiento De Emergencias – Primeros Auxilios
- Lleve el paciente a una habitación fresca y póngalo medio sentado.
- Quítele las prendas de vestir y póngale trapos o sábanas húmedas con agua fría en todo el cuerpo.
- Ponga un ventilador directo al cuerpo del paciente hasta que su temperatura se baje al menos hasta 38 grados.
- Dele un vaso de agua cada 15 min.
- Si la temperatura se vuelve a subir, repita todo el procedimiento, cada vez cambiando los trapos por otros recién sumergidos en agua fría.
- Llame inmediatamente a una ambulancia o llévelo a la sala de emergencias.
- Ya que un golpe de calor puede causar desmayos, ponga la persona boca arriba, con los pies en alto hasta que se le de ayuda médica profesional.
Fuente: Reader’s Digest, How To Do Just About Anything, Heat Stroke.